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EU recrimina a México por supuesta triangulación de acero y aluminio

  • Intro Text (Teaser): La USTR acusó falta de transparencia en la información sobre importaciones de México desde terceros países, pero la Secretaría de Economía reviró que todos los datos están disponibles.

La USTR acusó falta de transparencia en la información sobre importaciones de México desde terceros países, pero la Secretaría de Economía reviró que todos los datos están disponibles.

Estados Unidos recriminó a México por la supuesta falta de transparencia en la información sobre sus importaciones de acero y aluminio desde terceros países y le advirtió que está latente la reimposición de aranceles a estos productos, pues le preocupa la posible triangulación de producto asiático hacia territorio estadounidense.

Katherine Tai, representante comercial de la Casa Blanca, transmitió el mensaje a su par, Raquel Buenrostro, titular de la Secretaría de Economía, en una reunión virtual llevada a cabo este fin de semana.

“La embajadora Tai enfatizó la urgente necesidad de que México tome medidas inmediatas y significativas para abordar el actual aumento de las exportaciones mexicanas de acero y aluminio a Estados Unidos y la falta de transparencia con respecto a las importaciones de acero y aluminio de México desde terceros países”, informó la Representación Comercial de Estados Unidos (USTR, por su sigla en inglés) en un comunicado este viernes.

Washington expresó su insatisfacción con los resultados en el diálogo binacional alrededor de este tema, luego de más de un año de conversaciones.

Y dejó entrever que, si los avances no son suficientes, Estados Unidos podría imponer nuevamente aranceles al acero y aluminio procedentes de México, como ya lo hizo por un breve período entre el 2018 y el 2019.

 

“La embajadora Tai enfatizó que la Declaración Conjunta de 2019 sobre los Derechos de la Sección 232 sobre el Acero y el Aluminio permite la reimposición de los aranceles de la Sección 232”, hizo notar la USTR.

Sin embargo, dejó en claro que, “las conversaciones entre ambos países seguirán en curso”.

La respuesta pública de la Secretaría de Economía se difundió el mismo viernes. De saque, se hizo notar una coincidencia entre México y Estados Unidos, pues se informó que la reunión fue “para abordar las preocupaciones compartidas en el comercio de acero en América del Norte”.

Y la Secretaría de Economía recordó que, en esa tónica, “México recientemente homologó con Estados Unidos aranceles al acero y aluminio frente a aquellos países con los que no se tiene suscrito un tratado”.

Sin embargo, negó la acusación de la USTR sobre una supuesta opacidad de información en cuanto las importaciones de acero de México desde terceros países.

“La Secretaría de Economía rechazó la falta de transparencia, reiterando la disposición de compartir la información que se requiera para identificar la trazabilidad de productos y combatir la triangulación en América del Norte, un problema que afecta por igual a las industrias de México, Estados Unidos y Canadá”, dijo.

Y agregó que propuso una agenda de cooperación que entre otros aspectos incluye consolidar la homologación arancelaria, la cooperación entre agencias antidumping para hacer más eficientes sus investigaciones y resoluciones, y el fortalecimiento de los mecanismos regionales de trazabilidad.

En una carta fechada el 13 de diciembre pasado y enviada al consejero de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, un total de 14 senadores de Estados Unidos pidieron a la administración del presidente Joe Biden frenar el crecimiento de las importaciones de acero desde México.

Sin especificar las violaciones, los legisladores detallan, en cambio, el crecimiento de las importaciones referidas, así como operaciones empresariales, y pidieron que la USTR concluya un acuerdo bilateral para supervisar los flujos comerciales del acero.

El contexto

El acero y el aluminio ha sido un tema sensible en la agenda económica de Estados Unidos en la última década, en medio de la preocupación por la creciente capacidad de producción de China y las acusaciones contra ese país por la comisión de prácticas dumping.

En el 2018, el gobierno del expresidente Donald Trump impuso aranceles de 25% a las importaciones de acero y de 10% a las de aluminio, amparándose en la Sección 232 de una ley de 1962 que permite al presidente estadounidense restringir las importaciones si amenazan la seguridad de su país.

México y Canadá fueron afectados inicialmente por la medida, pero eximidos posteriormente en mayo del 2019, luego de la firma de la Declaración Conjunta de 2019 sobre los Derechos de la Sección 232 sobre el Acero y el Aluminio, que incluyó el compromiso para adoptar diversas medidas para evitar la triangulación o “transbordo” de producto a precios dumping desde terceros países.

Puntualmente, México y Estados Unidos acordaron establecer un proceso para monitorear el comercio de aluminio y acero entre ellos, y llevar a cabo un sistema de consultas permanentes. México y Canadá se desistieron de los litigios que habían iniciado ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Canacero niega triangulación

Por su parte, la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y Acero (Canacero) sostuvo que resulta “falso” y sin fundamento mencionar que México triangula productos de acero asiáticos a Estados Unidos.

El organismo privado destacó en un comunicado que el “acero mexicano se exporta a Estados Unidos con legalidad, transparencia, competitividad y respeto a las normas comerciales internacionales y particularmente las establecidas en el T-MEC y el Joint Statement para la exclusión de México de las medidas de la Sección 232 acordado en 2019”.

Y agregó que “México ha colaborado abiertamente con Estados Unidos en defender a la región de Norteamérica contra la triangulación y prácticas desleales de comercio en el sector acero. Es falso que las exportaciones de acero de México afecten a Estados Unidos”.

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